Terapia Craneosacra
“El Líquido Cefalorraquídeo fluctúa rítmicamente dentro de una cavidad natural: el neurocráneo, y puede ser observado a través de nuestra palpación. Es por el hecho de que el cuerpo está básicamente compuesto de fluidos y porque además en parte se absorbe este líquido cefalorraquído hacia el sistema linfático, que podemos ver la fluctuación del líquido cefalorraquídeo a través de todo el cuerpo.”
(Dr. Rollin E. Becker)
Es una terapia relativamente moderna (principios del siglo XX). Hubo un osteópata llamado William Sutherland que demostró, tras 20 años de investigación, que los huesos del cráneo se movían por sus suturas, en contra del pensamiento predominante que definía el cráneo como una estructura rígida. Por supuesto este movimiento era mínimo y muy sutil, pero su hallazgo dio lugar al nacimiento de un sistema de examen y tratamiento conocido como Osteopatía Craneal.
En el centro del cráneo hay unas estructuras llamadas ventrículos cerebrales que originan de forma periódica el líquido cefalorraquídeo. Éste baña el sistema nervioso protegiéndolo y se reabsorbe entrando de nuevo en el organismo, creando un ritmo, una expansión-retracción que se conoce como ritmo craneosacro. Al igual que hoy en día no puede discutirse el valor de los ritmos cardiovascular y respiratorio, desde hace más de 40 años se ha propuesto la utilización del ritmo craneosacro para mejorar las funciones corporales y ayudar a aliviar el dolor y el malestar. En Fisiozen es una de las técnicas de elección que utilizamos, combinándolas con otras terapias manuales. Los tratamientos tienen una duración de 50-55 minutos y se aplica tanto en el adulto como en el niño y en el bebé.
El sistema craneosacro está formado no sólo por el cráneo y sacro como huesos, sino también por una serie de membranas intracraneales (entre ellas la más extensa es la duramadre pues tras recubrir los huesos craneales por dentro, se continúa a lo largo del canal formado por las vértebras en toda la columna vertebral envolviendo a la médula espinal, para terminar en el sacro). Asimismo, toda la circulación intracraneal dirigida por un conjunto de vasos conocidos como senos venosos más su conjunto arterial, forman parte de este sistema.
Cada hueso del cráneo tiene un movimiento que evaluamos y tratamos. Cuando se trata con esta terapia se utiliza un tacto muy suave (se dice “el peso de una moneda de 20 céntimos”), se puede utilizar tanto en adultos como en bebés, y las sesiones tienen una duración de 50-55 minutos. Esta metodología ha demostrado aliviar una amplia gama de trastornos como problemas de succión y respiración en bebés, cólicos del lactante, lesiones del sistema nervioso central, dolores craneofaciales y migrañas, fatiga y estrés, dolores crónicos del cuello y espalda, hernias de disco, bruxismo y disfunciones de la ATM (articulación temporomandibular), trastornos del aprendizaje, estrés post-traumático y emocional, autismo y trastornos de conducta…